S.E. Monseñor Guillermo Antonio Cornejo Monzón nació el 1 de noviembre de 1964 en Piura. Ingresó en el Seminario Santo Toribio de Mogrovejo y obtuvo la licenciatura en filosofía y teología en la Facultad Pontificia y Civil de Teología de Lima.
![](https://www.arzobispadodelima.org/wp-content/uploads/2021/09/guillermo-cornejo-obispo-auxiliar-1024x682.jpeg)
Fue ordenado sacerdote el 8 de diciembre de 1994, incardinado en la archidiócesis metropolitana de Lima; posteriormente pasó al clero de la nueva diócesis de Lurín, desmembrada de la archidiócesis metropolitana de Lima, el 14 de diciembre de 1996.
Ha desempeñado los siguientes cargos: párroco de La Anunciación (1994-2006); consejero diocesano de Pastoral Vocacional (1994-2001); responsable de la zona pastoral II de ls Forania II (2002-2008); consejero diocesano de Pastoral Juvenil (2004-2010); responsable del equipo diocesano de animación pastoral (EDAP) (2009-2013); responsable general del área diocesana de evangelización (2015-2018).
Hasta ahora ha sido párroco del Niño Jesús, vicario foráneo de la Forania II y responsable de la pastoral penitenciaria y de la tercera edad.
Escudo de Monseñor Guillermo Cornejo
Lema episcopal: Les aseguro que cada vez que lo hicieron con el más pequeño de mis hermanos, lo hicieron conmigo.
![](https://www.arzobispadodelima.org/wp-content/uploads/2021/04/ESCUDO-EPISCOPAL-M.-GUILLERMO-Obispo-Auxiliar-de-Lima-2021-900x1024.jpg)
La Sagrada Familia.
Es el modelo de espiritualidad, de virtudes cristianas para todas las familias del mundo y de la Iglesia. Muestra la unión entre sus miembros. Quize que esté la Sagrada Familia, María con el Niño Jesús y San José en su año.
Manos saliendo de las cadenas:
Representa a los hermanos que necesitan romper las cadenas para liberarse de todo lo que impide el encuentro con Dios y la felicidad que conlleva ser discípulo del Señor. También, de acuerdo a mi cercanía y cariño hacia nuestros queridos hermanos que perdieron su libertad.
Pareja de ancianos.
Nos muestran la solidaridad y apoyo a los más débiles, que el amor para toda la vida existe y que son reflejo del amor de Dios. Ellos representan a todos los humildes, sencillos, olvidados, enfermos por el Covid 19.
El amanecer.
Cada amanecer significa la esperanza que el Señor nos brinda, porque da vida a un nuevo día para cada uno de nosotros, a un nuevo sol, a la ilusión de que el mundo será mejor. Nuestra naturaleza nos debe invitar gracias a Dios, vivir una vida con fe, con caridad, con esperanza.